El hombre que sabía demasiado


El hombre que sabía demasiado.

David Leavitt


Antoni Boch, editor. 2006



Páginas 259 y 260.
   La idea del suicidio, si se le ocurrió en absoluto, tuvo que ocurrírsele de forma repentina. El método, por otra parte, parece haberlo albergado en algún rincón de su mente durante años. Por ejemplo, desde Princeton le dijo su amigo James Atkins a Hodges, Turing había escrito una vez una carta proponiéndole un método de suicidio que «requería una manzana y cableado eléctrico». A menudo les contaba a sus amigos que todas las noches antes de acostarse se comía una manzana. Y claro está, en Cambridge, durante semanas después del estreno de Blancanieves y los siete enanitos, canturreaba mientras bajaba por el pasillo del King's
Dip the apple in the brew
Let the sleeping death seep through... 
("Sumerge la manzana en el brebaje/ Y deja que el sueño de la muere te la ultraje»)
   En la actualidad la fascinación por la manzana sigue presente. Se habla mucho de las connotaciones metafóricas de la misma. (Manzana de la muerte, manzana del saber... ¿exceso de saber?). En internet circula un rumor según el cual la manzana del logo de Apple Computers es un guiño a Turing. La compañía niega que exista relación alguna. Al contrario, insiste en que su manzana es una alusión a Newton. Pero en tal caso, ¿por qué le falta a ésta un bocado?
   Quizá lo que nos aterra sea que Turing optó por echar mano de una mezcla de inocencia y banalidad, de un cierto camp, al quitarse la vida, rodeando su despedida de un mundo que le bahía tratado mal con algo de la brillantez colorista, gótica y fantasmagórica de una película de Disney. Y no obstante, en todas las páginas que he leído acerca de él —y son legión— nadie ha mencionado aún lo que para mí parece ser el mensaje más obvio: en el cuento de hadas, la manzana que muerde Blancanieves no la mata: sólo la deja dormida hasta que el príncipe la despierta con un beso.











Alan Mathison Turing murió el 7 de junio de 1954.
David Leavitt ya apareció por aquí.
En este enlace encontrarás más sobre Turing y puedes ojear el libro desde aquí.