Sixto Ríos, Luis A. Santaló, Manuel Balazant
Instituto de España. 1979
Páginas 29 y 30.
Dice Rey Pastor:
Coincidente con Ortega en la existencia de simbiosis entre las diversas actividades científicas, discutí, con todo el respeto que me inspiraba el gran vidente del problema español, mi optimismo fortificado tras la convicencia con los estudiosos alemanes. No había ninguna tara racial; y si la había, estaba por probarse, pues desde el siglo XVI el talento español, aislado del mundo, se había enquistado como un tumor, según decía Cajal, cuyo ejemplo debía animarnos para imitarle en su aventura victoriosa.
Enfervorizado así el gran filósofo y sobreponiéndose a su escepticismo, apadrinó el modestísimo Seminario de Matemáticas en 1918, y él mismo logró el apoyo legal y material de la inolvidable Junta encargada del del fomento de la investigación científica en España, cuyas figuras señeras, que hoy echamos muy de menos, eran Cajal, Bolívar y Castillejo, con la colaboración asidua de don Ramón Menéndez y Pidal.
De aquel Seminario, instalado en un sótano, procede nuestro gran geómetra Santaló y nuestros colegas San Juan y Ríos, que dominan el Análisis matemático en su doble faz: el puro y el aplicado. Bastarían todos tres, que ya han conquistado merecido prestigio internacional, para desmentir el prejucio racial, tan unánime como infundado. Han bastado tres décadas de trabajo serio para desligar drásticamente el supuesto maleficio.
Esto decía Rey Pastor en el discurso de contestación al de ingreso de Sixto Ríos en la Real Academia de Ciencias de Madrid.
Además Luis Santaló murió el 22 de noviembre de 2001 en Buenos Aires.
Rey Pastor ya apareció por aquí y Sixto Ríos también.