El Acertijo del Mandarín y otras diversiones matemáticas


El Acertijo del Mandarín y otras diversiones matemáticas. Los mejores acertijos del más genial creador inglés de problemas de ingenio.

Henry E. Dudeney

Zugarto ediciones, S.A. 1993

Página 104.
El tonel de vino 
   He aquí un curioso problemita. Un hombre tenía un tonel de diez galones lleno de vino y una jarra. Un día sacó una jarra de vino del tonel y completó el tonel con agua. Luego, cuando el vino y el agua estaban bien mezclados, sacó otra jarra y de nuevo completo el faltante con agua. Entonces se descubrió que el tonel contenía iguales proporciones de vino y agua.
   ¿Puede usted averiguar, a partir de estos datos, la capacidad de la jarra?


Página 107.
Los jugadores de fútbol 
   -¡Es un deporte glorioso! -exclamó un fanático. Al cierre de la última temporada, de los futbolistas que conozco cuatro tenían el brazo izquierdo roto, cinco tenían el brazo derecho roto, dos tenían el brazo derecho sano y tres tenían el brazo izquierdo sano.
   ¿Puede usted descubrir cuál es el menor número posible de futbolistas que conocía nuestro entusiasta?
   De los datos no se sigue que hubiera catorce hombres, porque, por ejemplo, dos de los hombres que se habían roto el brazo izquierdo podrían ser los dos que tenían el brazo derecho sano.



Página 117 y118.
Una falacia ajedrecística 
   -He aquí el diagrama de un tablero de ajedrez -dijo-. Hay sesenta y cuatro cuadrados, ocho por ocho. Ahora dibujo una línea recta desde la esquina superior  izquierda, donde se juntan el primero y el segundo cuadrados, hasta la esquina inferior derecha. Corto por esta línea con la tijera, alzo la sección que he denominado B, y recorto la esquina C mediante un tajo en la primera línea superior. Este fragmento encajará perfectamente en su sitio de arriba, y ahora tenemos un rectángulo con siete cuadrados en un lado y nueve cuadrados en el otro. Por tanto, ahora hay sólo sesenta y tres cuadrados, porque siete multiplicado por nueve da sesenta y tres. ¿Adónde fue ese cuadrado perdido? Una y otra vez he intentado pillarlo pero siempre se me escapa. A fe mía, no puedo descubrir dónde se oculta.
   -Parece similar a esa otra vieja falacia ajedrecística, y quizá la explicación sea la misma -dijo Reginald-. Que las dos piezas no encajan a la perfección.
   -Pero sí encajan -dijo el tío John-. Prueba y verás.
   Más tarde, esa noche, se vio a Reginald y George juntos, en un rincón, tratando de pillar al elusivo cuadrado, y es justo consignar que antes de acostarse a dormir lograron capturar la presa, aunque algunos miembros del grupo no lograron verla cuando la cogieron. ¿Puede el lector resolver este pequeño misterio? 



Página 120.

El bloque "cola de milano" 
   He aquí un curioso acertijo mecánico que me dieron hace algunos años, aunque no sé quién lo inventó.
   Consiste en dos bloques sólidos de madera unidos mediante un encastre "cola de milano". En los otros dos lados verticales que no son visibles la apariencia es exactamente igual a la que vemos en la ilustración. ¿Cómo se unieron ambas piezas? Cuando publiqué este pequeño acertijo en un periódico londinense recibí (aunque sin solicitarla)una pila entera de modelos, en roble, teca, caoba, palisandro, fustete, olmo y pino; algunas de medio pie de longitud, y otros de diverso tamaño, incluido un delicado modelo de media pulgada cuadrada. Al parecer creó considerable interés.







¿Sabes las respuestas?
Acompañando al libro incluyo un bloque "cola de milano" como los que recibió Dudeney.